Golpe político: Los senadores de Santa Cruz anunciaron que rechazan la ley bases

Los senadores santacruceños José María Carambia y Natalia Gadano anunciaron por Instagram que votarán contra la ley Bases y pusieron al gobierno al borde de una crisis letal. A través de esa plataforma, dijeron que la ley Bases no es la prioridad sino la movilidad jubilatoria, tal como publicó LPO el jueves pasado cuando informó que había legisladores patagónicos que se negaban bajar a recinto para discutir el proyecto oficial si antes no se debatía la recomposición de los haberes previsionales.

También expusieron con su testimonio la mala praxis del gobierno, que había empezado a negociar con Miguel Pichetto y con Emilio Monzó el blindaje a la versión que se aprobó en la Cámara Baja el pasado 30 de abril mientras los senadores reclamaba modificaciones.

En su video, los patagónicos argumentaron que hace dos semanas firmaron el dictamen en disidencia y reclamaron cambios que ahora el oficialismo no respetaría. “Hace varios días que estamos sufriendo presiones del gobierno nacional con respecto a esto y realmente no cumplieron y ya quieren cambiar lo que habíamos acordado”, expresó Carambia.

En ese sentido, consideró que “el lobby minero es muy grande”, en referencia a su demanda de que se aumenten las regalías por esa actividad de 3 a 5 por ciento. 

Con la confirmación de su rechazo, anticipo revelado por LPO, la oposición alcanzaría 36 votos contra la ley, sumando a los 33 peronistas y Martín Lousteau. Para colmo, la Casa Rosada entró en pánico este martes: en las últimas horas, trascendió que el radical Maximiliano Abad “no tiene definido” lo que hará en recinto.

Hasta esta mañana, el oficialismo contaba el apoyo de Abad como uno de los 36 votos por la afirmativa. Si el titular de la UCR bonaerense se abstuviera, los libertarios podrían perder la votación por uno.

Desde su entorno, advirtieron a LPO que “los cambios a los que accedió el gobierno fueron cosméticos”, una frase casi calcada de la que expresó el propio Lousteau durante la última reunión del plenario de comisiones en la Cámara Alta. Además, recordaron que Abad no firmó ninguno de los dictámenes.

Esa postura profundiza la incertidumbre del Poder Ejecutivo, que al cierre de esta nota creía que Abad estaba a favor de la ley. “Los radicales dicen que, en realidad, vio cómo se lució Lousteau y ahora quiere mojar el pancito”, comentaron a LPO.

El nerviosismo en el gobierno por el futuro de la ley alcanzó a la vice Victoria Villarruel, que improvisó este martes un almuerzo con Guillermo Francos y Juan Carlos Romero. “Son unos pelotudos incorregibles”, dijo anoche sobre el gobierno uno de los senadores más activos en las negociaciones para lograr su sanción.

Si Villarruel y los libertarios Bartolomé Abdala y Ezequiel Atauche no consiguieran el quórum, la sesión se caería y el oficialismo debería volver a convocarla. “Quizá al gobierno le convenga que se caiga y tener más tiempo para seguir negociando la ley”, comentaron a LPO cerca de un gobernador, aunque también admitieron que “la imposibilidad de sesionar ahonda los problemas políticos de Milei”.

Por esa razón, la Vicepresidenta y funcionarios del Poder Ejecutivo, entre los cuales se señalan a Francos y al flamante secretario de Interior, José Rolandi, reforzaron las presiones sobre los gobernadores peronistas, con el objetivo de que aporten la presencia de los legisladores que les responden para garantizarse el quórum. Bajo ese propósito, hicieron sonar los teléfonos del catamarqueño Raúl Jalil, luego de que fracasara el último intento para que el tucumano Osvaldo Jaldo persuadiera a Sandra Mendoza de votar a favor.

El caso de Gadano y Carambia, por su parte, se basa en la sospecha de que el gobierno, tal como reveló LPO, planea blindar la mayoría que dio media sanción al dictamen en Diputados. De esa manera, descartaría los cambios que los senadores libertarios habrían aceptado.

Carambia, dicen en Santa Cruz, está convencido que Javier Milei no respetará el acuerdo de elevar las regalías mineras de 3 a 5 puntos, mientras que Gadano exigía que se tratara el proyecto de aumento a jubilados y rediseño de la fórmula de los haberes previsionales antes que la ley Bases.

LPO anticipó el jueves pasado que la senadora amenazó con no bajar al recinto para tratar el proyecto del gobierno si no aceptaban debatir el despacho que aprobó la Cámara Baja con 160 votos la semana pasada. Asimismo, entre sus condiciones apuntaban que requería el compromiso de Milei respecto de que no vetaría el aumento a los jubilados.

Como sea, en la Casa Rosada crece la frustración con los santacruceños. El gobierno está en llamas porque Carambia habría apagado el teléfono después de informarle a José Rolandi que lo que negoció valía solo para firmar el dictamen pero no para aprobar la ley.

Al cierre de esta nota, el Gobierno decidió que Villarruel intente una gestión con María Eugenia Vidal para que convenza a Gadano, que pertenecía a su armado y es, a la sazón, cuñada de su ex funcionario Alex Campbell. “¿María Eugenia Vidal defiende la ley en cadena nacional pero Gadano va a votar en contra?”, preguntan con indignación en un despacho aliado.

El Gobierno decidió que Villarruel intente una gestión con María Eugenia Vidal para que convenza a Gadano, que pertenecía a su armado y es cuñada de su ex funcionario Alex Campbell.

Por otro lado, la neuquina Lucila Crexell había cedido en su tensión con el gobernador Rolando Figueroa y había aceptado acompañar a los libertarios, según declaró durante el fin de semana a La Mañana de Neuquén. El decoro que buscó con su postura pública quedó manchado este martes, cuando llegó al Senado el pliego con su designación como embajadora argentina ante la UNESCO, algo que la legisladora habría acordado mano a mano con Villarruel antes de la firma del dictamen pero que trataba de desmentir.

En tanto, los peronistas federales Edgardo Kueider y Carlos “Camau” Espínola se mantendrían firmes en su apoyo a la ley, aunque integraron el Frente de Todos hasta enero de 2023. Fuentes parlamentarias alegan que no pueden darle la excusa al gobierno de no otorgarle herramientas para la gestión, un argumento que Guadalupe Tagliaferri rebatió en la entrevista que le concedió LPO.

Esta nota fue publicada en el portal LaPolíticaOnline. Leer más