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“Desde el 10 de enero, Venezuela será abiertamente una dictadura sostenida por las Fuerzas Armadas”
Nicolás Maduro se encamina a asumir como presidente de Venezuela a pesar del fraude electoral del pasado 28 de julio y en medio la negativa para presenta las actas electorales que confirmen la victoria chavista.
De las elecciones a esta parte, el régimen reforzó el aparato represivo para detener opositores y cerrarse en un núcleo duro del madurismo que profundizó el aislamiento de Venezuela en la región por la distancia que tomaron Brasil y Colombia y el rechazo del resto de los países de la región.
En este marco, un grupo de dirigentes provenientes del chavismo y se alejaron con el giro autoritario que quiere construir una alternativa por izquierda llamada Comunes, algo que parece imposible en este contexto.
LPO habló con su vocero, Antonio González Pelssmann, quien explicó “Comunes nace como una alternativa política de izquierda, frente al madurismo, frente a la oposición de derecha y frente a la oposición “alacranizada” que es el nombre con el que se conoce en Venezuela a aquella oposición que resulta funcional al gobierno de Maduro e, incluso, le hace parte del trabajo sucio”.
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Plessmann detalló que “nos planteamos acumular fuerza para disputar el poder político y ser un referente tanto de sectores que viniendo del chavismo identifican el giro neoliberal de Maduro y su deriva autoritaria, como de otros sectores sociales que defienden el modelo democrático progresivo establecido en la Constitución de 1999”.
Para el dirigente venezolano “el madurismo (con Maduro a la cabeza) es una mutación. Aunque viene del chavismo, no puede llamarse con propiedad chavista. El chavismo es una corriente claramente popular, antineoliberal, poscapitalista y radicalmente democrática. En la vereda del frente, el madurismo se sostiene en una alianza de distintos sectores de la burguesía y la fuerza armada (algunos de cuyos integrantes también han acumulado riquezas a través de la corrupción), es decir, no es popular; aplica una política económica neoliberal y renunció a las garantías democráticas previstas en la Constitución”.
El vocero de Comunes remarcó “la política económica de Maduro implica la privatización de activos del Estado, la liberalización de precios, la exoneración de impuestos para importaciones, una muy disciplinada política fiscal, una contracción del gasto social y la derogación de facto de los derechos laborales”.
“En Venezuela, el salario mínimo desde hace 2 años está congelado en 3 dólares mensuales. Aunque los empleadores pagan bonos que aumentan ese monto, las vacaciones, utilidades, prestaciones y otros derechos se calculan sobre el monto del salario, es decir, 3 dólares. Esto ocurre, pese a que en los últimos 2 años la economía ha venido creciendo”, agregó.
El dirigente también asegura que “la inflación ha reducido a partir de una contracción brutal de la demanda y del aumento de la desigualdad. Las protestas frente a la vulneración de derechos sociales que es consustancial al ajuste ha sido respondida con detenciones arbitrarias de más de 200 trabajadores, con la persecución e intimidación. El fraude electoral del 28 de julio y la respuesta represiva masiva (mas de 2000 personas detenidas por protestar el fraude han sido acusadas de terrorismo o incitación al odio) son un hito en el régimen político”.
Antonio González Pelssmann, vocero de Comunes.
“Pasamos de un régimen hibrido, autoritario pero que ritualmente recurría a algún tipo de legitimación democrática a un régimen que prescinde de la voluntad de las mayorías. El gobierno que se proclamará, muy probablemente, el próximo 10 de enero es una dictadura sostenida por las Fuerzas Armadas y sectores de la burguesía”, añadió.
Sobre las posibilidades concretas de una alternativa de izquierda en un sistema político cuya oposición principal es de derecha, Plessmann dijo que “en este momento no es posible una salida progresista, porque los distintos tipos de izquierda venezolana están muy disminuidas. Faltan actores. En parte por eso nace Comunes”.
Por otro lado, el vocero de Comunes planteó que “la actuación de Lula y Petro es la correcta. Al tiempo que exigen pruebas del resultado electoral (pruebas que nunca llegarán porque hubo un fraude), intentan abrir canales de dialogo y negociación. Porque la alternativa a la política es la violencia”. “Para recuperar la democracia algunos apuestan a invasiones, nuevas sanciones o golpes de Estado. Otros apostamos a aumentar la fuerza popular para forzar a los actores a crear un contexto democrático. En esa línea, me parece que están Lula y Petro”, enfatizó.
Por último, Antonio González Pelssmann sostuvo que “el pueblo venezolano apostó a una salida democrática y constitucional de la crisis y votó mayoritariamente contra Maduro. Incluso en los territorios más chavistas la gente votó mayoritariamente contra Maduro. Pero las instituciones decidieron dar un zarpazo a la voluntad popular. Frente a eso, los sentimientos mayoritarios son la rabia, la frustración, el miedo y la desesperanza”.
“Por ahora, pareciera que la dictadura va a nacer el 10 de enero pero esos sentimientos siguen ahí. Hay lava volcánica debajo de la aparente normalización que empuja el madurismo. Y eso puede abrir juego político en el mediano plazo”, culminó.
Esta nota fue publicada en el portal LaPolíticaOnline. Leer más
